Nombre~ Ariel
Aniversario~ 07/05
Ubicacion~ Jujuy, Argentina
Descripcion~ Pues este es mi blog, el lugar donde puedo gritar y dejar
una reseña de mi vida.
Lectura~ Ciencia-Ficción, literatura fantastica y de terror.
Musica~ Metal (en todas sus variantes), Visual Kei y toda musica que sea
original.
Aficiones~ Leer, escuchar música, salir a caminar.
Deseo~ Encontrar a alguien especial. Poder ser alguien mejor.
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Alguna vez, ante mi falta de fe, me dijeron: "¿Qué propones vos? Ya que rechazas todo en lo que creemos, ¿qué nos propones para reemplazarlo?" Yo no he rechazado lo bueno. Sólo me he esforzado para salir con paso firme de los fuegos crueles e ignorantes del infierno. No ignoro el pasaje "Dios será misericordioso con el misericordioso". Ni rechazo la promesa "Si perdonas a otros, Dios te perdonará". Por nada del mundo apagaría la más débil estrella brillando en el horizonte de la desesperación humana, ni en el cielo de la esperanza humana, pero haré lo que pueda para remover de mi corazón esa sombra de infinita ignorancia que es la religión.
Me dicen: "¿Qué propones en lugar de esto?" Bien, en primer lugar, propongo un espíritu de paz y concordia: hacer buenos amigos en todas partes. No importa en qué creamos, estrechemos nuestras manos y dejémoslo así. Esa es tu opinión, ésta es la mía: seamos amigos. La ciencia crea amigos; la religión y la superstición crean divisiones y desprecio. Se dice: "Creer es importante". Yo digo: No, son importantes las acciones. Juzga por los actos, no por las creencias. Paz y concordia, buenos amigos, hombres y mujeres sinceros, tolerancia mutua, surgida del respeto mutuo... Me cuesta creer en el perdón como lo predican las religiones. No necesitamos el perdón de un Dios, sino el de los otros y el nuestro. Si le robo al señor Pedro y Dios me perdona, ¿en qué ayuda eso al señor Pedro? Si yo, después de cometer un crimen, acuso de ese crimen a alguna pobre joven, ella va a la cárcel, y ahí se marchita como una flor en decadencia y luego yo obtengo el perdón de Dios, ¿en qué la ayuda eso? Si hay otro mundo, tendremos que compensar a la gente que hemos perjudicado en éste. No hay convocatorias de acreedores allí. Hay que pagar cada centavo... En esto creo. Y si me trae problemas, lo sostendré, y me afirmaré en mi lógica, y lo aceptaré como un hombre. Y también creo en el evangelio de la Libertad, en dar a otros lo que pedimos para nosotros. Creo que hay lugar en todas partes para el pensamiento, y mientras más libertad demos, más libertad tendremos. Seamos justos. Seamos generosos el uno con el otro... Dicen: "¡Ah!, pero eso no alcanza. Vos tenes que creer". Yo digo: No. Un evangelio de libertad traerá vida. Un evangelio de inteligencia, un evangelio de buen vivir, un evangelio de concordia cubrirá al mundo de hogares felices. Una doctrina así pondrá alfombras en los pisos, cuadros en las paredes; pondrá libros en las repisas, ideas en las mentes. Una doctrina así librará al mundo de los dioses nacidos del miedo y la superstición. Una doctrina así nos dará salud, bienestar y felicidad. Esto es lo que quiero. En esto creo. Démosnos inteligencia. Pero por sobre todo, tolerancia y respeto mutuo. Si hacemos eso, en poco tiempo, el hombre descubrirá que no puede robar sin robarse a sí mismo. Descubrirá que no puede asesinar sin asesinar su propia felicidad. Descubrirá que cada crimen es un error... Me dicen: "Ah, pero eliminas la inmortalidad del alma". No lo hago. Si somos inmortales, eso es un hecho natural, y no se lo debemos a los sacerdotes, y no puede ser destruido por el descreimiento. Mientras amamos esperamos vivir, y cuando muere el ser amado, diremos: "Espero que podamos encontrarnos de nuevo", y lo hagamos o no, no es obra de la teología. Será un hecho de la naturaleza. Por mi vida, no destruiré un ápice de la esperanza humana, pero quiero que, cuando una pobre madre soltera mece la cuna y canta un arrullo a algún adorable niñito, no se le haga creer que ese niño es fruto del pecado y que ella esta condenada. "Hay bastante mal para un día" dicen algunos; y yo digo: "Hay bastante mal para un mundo". Y supongamos que, después de todo, la muerte es el fin. Cercano al goce eterno, cercano a estar para siempre con los que quisimos y nos han querido, cercano a ello, está el ser envuelto en el lienzo sin sueños de la paz eterna. Dicen que la muerte es hermana del sueño, entonces cerca de la vida eterna está el sueño eterno. En las costas sombrías de la muerte, el mar de los problemas no agita ninguna ola. Los ojos que han sido cubiertos con la oscuridad permanente no volverán a conocer jamás el roce ardiente de las lágrimas. Los labios cerrados por el silencio eterno no volverán a emitir jamás las quebradas palabras de la congoja. Los corazones de polvo no sufren. Los muertos no lloran. Dentro de la tumba no yacen penas veladas y sollozantes, y en la penumbra sin luz no se esconde ningún tembloroso temor. Prefiero pensar que aquellos que he querido y perdido han vuelto a la tierra, se han convertido en una parte de la riqueza elemental de la tierra. Prefiero pensar en ellos como polvo inconsciente bailando en el aire, prefiero soñar con ellos corriendo junto a las corrientes, flotando en las nubes, estallando en espuma de luz en las costas de los mundos, prefiero pensar que son los sueños perdidos de una noche olvidada, antes que tener el más mínimo temor de que sus almas desnudas han sido atrapadas por algún Dios ortodoxo. Dejaré a mis muertos donde los deja la naturaleza. Atesoraré cualquier flor de esperanza que florezca en mi corazón, le daré aliento con mis suspiros y la regaré con mis lágrimas. Pero no puedo creer que exista algún ser en el universo que haya creado el alma humana y por sus creencias la condene al dolor eterno. Antes preferiría que cada dios se destruyera a sí mismo; preferiría que todo se convirtiera en caos eterno, en noche negra y sin estrellas, antes que siquiera un alma humana sufriera agonía eterna. He decidido que si hay un dios, será misericordioso con los misericordiosos. Sobre esa roca me afirmo. Que no torturará a los que perdonan. Sobre esa roca me afirmo. Que cada hombre debe ser fiel a sí mismo, y que no hay mundo, no hay estrella, donde la honestidad sea un crimen. Sobre esa roca me afirmo. El hombre honesto, la mujer buena, el niño feliz, no tienen nada que temer, en este mundo o en el venidero. Sobre esa roca me afirmo. Musica: Walk Without Limbs - Virgin Black -ThE EnD-
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